Tras varios años sin cuidarme, física y psicológicamente me encontraba muy tocada y sin muchas esperanzas de poder darle la vuelta a esta situación.

Casualidades de la vida, a través de unos conocidos tanto mi marido como yo nos pusimos en contacto con Ainhoa y Krutx de Sasoituz. Les contamos mi situación y tras un par de charlas, en abril del 2016 nos pusimos a trabajar.

El objetivo principal desde el primer momento era bajar de peso y empezar a hacer ejercicio poco a poco. Los meses fueron pasando y yo seguía bajando de peso paso a paso. Además, cada vez me encontraba más capaz de ir haciendo los ejercicios que cada semana me “recetaban” Ainhoa y Krutx.

Tantas carreras detrás de mi marido animándole (Lasarte-Oria Bai!, B/SS, 3 Playas…) hicieron que me picara el gusanillo. Así que, qué mejor excusa para seguir motivándome con la bajada de peso que pensar en la posibilidad de llegar a correr alguna carrera.

Nos pusimos a ello. El proceso fue lento, ya que mi cuerpo no tenía ninguna base, pero semana a semana los resultados se iban viendo.

Llegamos al año de trabajo y el resultado estaba ahí: ¡¡¡28 Kg menos y de casi no poder caminar, a trotar 30 minutos!!!

Seguimos trabajando con la dieta y ejercicios de mayor intensidad y tras ir consiguiendo pequeños (pero muy importantes) logros en los entrenamientos, me apunto a mi primera carrera: La Txingudi Korrika, 10 km entre Hendaia y Hondarribia donde me espera mi primera meta…

Los días previos me pongo bastante nerviosa por ser la primera carrera, me entran dudas de si podré llegar, si llegaré en el tiempo máximo de corte, etc.

Llega el día de la carrera, me lo intento tomar con tranquilidad, mi carrera es conseguir llegar disfrutando del momento.

Nada más empezar ya me quedo descolgada del resto, pero no me importa, mi objetivo es otro. Poco a poco van pasando los kilómetros, la gente sigue animando y te ayuda a seguir. Cierto es que hay un momento en el que pienso en abandonar, pero sólo con pensar en todas las personas que me han estado ayudando y apoyando durante todo este tiempo, hacen que siga tirando.

¿El resultado de mi último año y medio? Mi cara lo dice todo.